sábado, 8 de abril de 2023

VITAL OSASUNA - ELCHE 8-IV-2023

Victoria de Osasuna en la vigesimoctava jornada de la liga Santander ante el Elche C. F. Era del todo necesaria por doble motivo. Recuperar la senda positiva tras dos malas jornadas y superar la resaca copera de esta semana. Se ha conseguido, eso es lo que importa. El modo o manera queda en segundo plano cuando todo te permite mirar al frente con optimismo. Se cierra una semana con dos triunfos de un par de malos partidos. Así es. En ambos se jugó mal pero el alirón final es lo que se lleva tras el pitido arbitral. 

Como decimos, había que pasar página tras el arreón copero y, por ello, saltaron al césped Aitor Fernández, Nacho Vidal, Unai García, David García, Manu Sánchez, Darko Brasanac, Pablo Ibáñez, Moi Gómez. Kike Barja, Abde y Ante Budimir. Muchas novedades pues la mayoría jugó como máximo media hora en Bilbao el pasado martes. El once inicial buscó puerta pero apenas la encontró; Kike Barja fue el que más se acercó a marcar en una jugada personal cuyo disparo final se le marchó por el segundo palo. 

En estas estábamos cuando sucedió la jugada hiperpolémica; Ante Budimir fue objeto de falta en el área ilicitana y el colegiado asturiano Pablo González Fuertes señaló penalti. No obstante, el VAR lo chequeó de modo muy prolongado y tardó lo suyo en pedir al árbitro que acudiese a la pantalla para su revisión. Realizada ésta anuló la jugada y el penalti. Lo curioso del tema es que los espectadores pudieron ver la repetición en los videomarcadores; todos vieron el contacto entre ambos jugadores pero si, a juicio del juez principal, no hubo nada punible ¿cómo es que no enseñó cartulina amarilla a Budimir por tirarse? Nadie tocó el balón ¿cómo cayó entonces el croata al suelo? No es de extrañar que el pitolari se llevase la "ovación" del respetable.

Osasuna quería pero faltaba ese plus de mayor definición y entendimiento para generar ocasiones claras de gol. Además de eso, sucedió la desdicha de perder por lesión a Darko Brasanac, quien fue sustituido por Jon Moncayola. Por contra, el Elche trató de jugar a la contra y halló premio llegando al área de Aitor Fernández a través de la banda de Nacho Vidal. Así, el delantero Tete Morente supo zafarse del defensa rojillo para plantarse sólo ante el marco osasunista y colar el gol en el minuto cuarenta y cuatro.

El caso es que al descanso las cosas pintaban bastos. Mala defensa de Osasuna y falta de efectividad en ataque. Yagoba Arrasate movió ficha para el segundo tiempo. Retiró a un mal Nacho Vidal y dio entrada a Aimar Oroz para jugar de interior mientras Manu Sánchez retrasaba su posición y jugaba de lateral izquierdo. Algo mejoró Osasuna al apretar más a su contrincante, pero no por ello dejó de llevarse algún que otro susto como el gol anulado a Lucas Boyé por mano.

El caso es que pasaban los minutos y el gol no caía. Afortunadamente, éste apareció en el setenta y uno de partido cuando Kike Barja ganó la espalda a los defensas para acercarse al área visitante, dio un centro magistral al punto de penalti, donde Abde remató mandando el esférico al fondo de la red. Empate y aún había tiempo para más.

Siguieron los rojillos apretando y con Abde como el mejor del equipo en esta tarde. El joven jugador anotó el segundo al caerle el balón en la frontal del área, la controló, la colocó en el segundo palo y marcó sin que el portero ilicitano pudiese hacer algo. El gran esfuerzo atacante de la segunda parte tuvo su premio. Todavía pudieron ser más ya que Kike García tuvo dos claras para anotar pero un defensa y, paradójicamente, Jon Moncayola frenaron sus disparos. 

Finalizó así el encuentro con un resultado justo por méritos y por el tiempo para remontar. Se suman treinta y ocho puntos y la distancia con el descenso es, de momento, de once. Por esta razón era importantísimo ganar para marcar trecho con la zona más caliente de la tabla.

Culmina una semana en vísperas del domingo de Resurrección. Era lo que necesitaba la afición rojilla tras unas jornadas con resultados parcos. La ilusión resucita en los asientos de El Sádar. Los más de dieciséis mil rojillos miran con optimismo al futuro. El 6 de mayo será la primera parada para lo que venga después de Liga europea y supercopa de España. En una semana se ha cosechado mucho, pero es más lo que puede adquirirse. 

No conviene bajar las espadas sino mantenerlas bien en alto porque los rivales de aquí en adelante son de suma dificultad. Por eso mismo, ante la inmensidad de lo difícil, hay que agrandarse, acoger  con alborozo los retos planteados y nunca bajar la guardia (menos en defensa como ha sucedido hoy). Con esta victoria se puede mirar mejor a los siguientes partidos y plantearse las cosas de otra manera. Realizar una hazaña histórica en el estadio de La Cartuja el próximo mes.

La afición rojilla estará ahí, acompañando a los suyos para dar lo máximo. Hay que trabajar, trabajar y trabajar. Este es el camino. Por de pronto así siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiií. Medítese todo con mucha, mucha fuerza. Valar dohaeris.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

SI TE ARRIMAS A LOS MEJORES, GRANDES Y BUENOS ALGO DE ELLOS SE UNIRÁ A TI.